¡Qué deliciosa la cena de anoche en
Málaga, en La Reserva, con mis amigos Ana María (coautora de ‘Liderazgo
Innovador para dummies’, ‘Nuevo Management para dummies’ y con quien
cerraremos, con permiso de la autoridad y si el tiempo no lo impide, la
trilogía en 2017), su marido Pepe y Antonio! se ha convertido en una tradición
cuando vengo a esta preciosa ciudad andaluza cenar en La Reserva y alojarme en
el Tryp Alameda, donde me tienen preparada una estancia muy muy especial!
Gracias, Ana, Pepe, Antonio y l@s profesionales del Alameda por hacerme sentir
tan bien.
Esta mañana he estado leyendo un
artículo de la web del World Economic Forum, ‘7 formas en las que l@s Milenials
son distint@s de sus abuel@s hace 50 años’ (www.weforum.org/agenda/2016/08/7-ways-millennials-are-different-to-their-grandparents-50-years-ago/)
escrito por Rosamond Hutt.
La autora nos recuerda que en 1966 la
confrontación entre EE UU y la URSS estaba candente, John Lennon decía que “los
Beatles eran más populares que Jesucristo” y pesaban instituciones como los
partidos políticos, la Iglesia, el Ejército o el matrimonio. A esos jóvenes de
mediados de la década de los 60 se les llamó “la generación silenciosa” (silent
generation). ¿Cuáles son las siete principales diferencias con l@s actuales
Milenials?
1. Mayor preparación: Sólo el 7% de
las mujeres de la “generación silenciosa” de entre 18 y 33 años tenían el
bachillerato; ahora, son el 27% de las Milenials. Entre los varones, era el 12%
hace medio siglo y ahora es el 21%.
2. Las mujeres están mejor formadas
que los hombres. Esa diferencia de seis puntos (27% vs 21%) entre bachilleres
era de cinco puntos negativos en la “silent generation”. Desde 1998, con la
Generación X, el talento femenino (en términos de estudios medios) supera al
masculino.
3. Las Milenials están más presentes
en el mercado laboral. En 1963, el 59% de las jóvenes no trabajaba. Hasta 1980,
ésa era la tendencia predominante. Hoy el 63% está empleada y sólo el 31% fuera
del mercado laboral.
4. L@s Milenials se enfrentan a un
mercado de trabajo más duro. Desde 2008, la crisis económica se ha hecho notar
en el empleo. El 78% de las generaciones anteriores (generación X, Baby
Boomers, generación silenciosa) está empleada; el porcentaje cae 10 puntos,
hasta el 68%, en l@s Milenials.
5. L@s Milenials se casan menos. Casi
siete de cada diez (el 68%) no se han casado. Y los que han contraído nupcias,
lo han hecho as tarde (por término medio, a los 27 las mujeres y a los 29 los
hombres). En 1963, lo hacían a los 21 y 23 respectivamente. En la generación
silenciosa sólo el 32% no se había casado.
6. L@s Milenials pertenecen a
minorías étnicas más que sus predecesores.
7. Los Milenials no son veteranos de
guerra. La “generación silenciosa” en 1963 había servido en la milicia diez
veces más: un 35%, comparado con el 3% de los Milenials.
Siete diferencias no tanto desde sus
gustos e intereses (a lo que estamos más acostumbrados), sino desde la
situación social de los Milenials. Probablemente, la primera generación que
ganará menos que sus antecesores.
En el AVE de vuelta a Madrid de esta
mañana he estado leyendo ‘Crecimiento y empleo. Una relación turbulenta e
incomprendida’ del economista del Banco de España Juan Francisco Jimeno. La
principal preocupación de los españoles (barómetro del CIS), el desempleo,
suele asociarse en su reducción con el crecimiento del PIB. En este texto,
Jimeno clarifica ambos conceptos y explica la baja productividad de la economía
española. Me ha gustado especialmente que “desmonta” una serie de falacias
económicas:
- La ley de Okun, en honor a Arthur
Okun (1962), que conecta actividad económica con tasa de paro. “Desde 1985, el
número de ocupados en la economía española fluctúa de forma similar al PIB”.
España es un caso peculiar (atípico) por la volatilidad del empleo, lo que
provoca despilfarro de capital humano y desigualdades sociales. Se trata de una
“ley inconstante” porque “se alimenta de múltiples afluentes”.
- La falacia de la cantidad fija de
trabajo. Depende de la temporalidad, de las innovaciones tecnológicas, etc.
“Las viejas falacias nunca mueren” (Milton Friedman, 1992). Sólo la soportan
“el analfabetismo numérico y la cerrazón ideologica”.
- La productividad es una gran
desconocida. La de nuestro país es baja por la escasa inversión en I+D y por el
sistema educativo. “La población activa española posee una distribución por
niveles educativos bastante peculiar” con muchos universitarios subempleados y
enorme fracaso escolar. “En España nunca han faltado los defensores de la
ignorancia”. Las políticas activas de empleo no se han evaluado de forma
decidida. “Ante todo, procrastinación y confusión”.
- Políticas de empleo “poco
políticas”. En opinión del autor, las reformas laborales han sido como “el día
de la marmota”, una y otra vez. “Contratamos y despedimos por las causas
equivocadas”.
- Y para el futuro, este experto se
teme problemas demográficos, de cambio climático y polarización del empleo
merced a la robotización.
Un libro estupendo, pleno de datos. O
mejoramos (radicalmente) la educación en nuestro país, e invertimos en ciencia
y tecnología (I+D) o nos espera un futuro poco halagüeño.