Vive 50, por Neus Arqués


Hoy tocaba libro importante. Me “encontró” ayer en la librería de El Corte Inglés de Alicante, cuando paseaba con una amiga, si bien me había hablado de él una persona a la que quiero especialmente. Se trata de ‘Vive 50’ de Neus Arqués, a quien conocí en los premios Princesa de Girona del año pasado. Había leído de ti, Neus, ‘Tu plan de visibilidad 40+’ y ‘Y tú, ¿qué marca eres?’ Como novelista, Neus Arqués ha pubicado ‘Un hombre de pago’, ‘Una mujer como tú’ y ‘Todo tiene un precio’ (premio Alares).
 Como anoche me acosté a una hora prudencial, he leído ‘Vive 50’ esta mañana desde las 6,15 horas. Con música de Rosana (‘Si tú no estás aquí’, ‘A fuego lento’, ‘Llegaremos a tiempo’ y otras perlas de su repertorio). Gracias, Rosana, por tu alegría y profundidad. Tenemos pendiente una comida con Belinda Washington, nuestra amiga común.
Neus nos regala, para empezar, una cita de Mary Oliver: “Instrucciones para vivir una vida: Presta atención. Sorpréndente. Cuéntalo”.
“Los cincuenta son los nuevos dieciocho. A los dieciocho te conviertes en mayor de edad; a los cincuenta, en mayor. Y como ya eres mayor, puedes hacer lo que quieras”. Neus cumplió 50 y en lugar de una fiesta, tuvo una crisis (como ella misma manifiesta). “Durante este año de tu vida no existe el off-limits”. El 23 de junio cumplió 50 años, tenía prevista una cela de gala para ser “princesa por un día” pero por la crisis no pudo ser (“no pude sacarlo adelante”). Y decidió vivir (y recopilar, para regalárnoslas a los lectores) 50 experiencias desde ese solsticio de verano.
En el primer mes, siete experiencias: asistir a otros cumples, merendar con ella misma, cenar con los vecinos en la calle, ser retratada (inmortalizarse), recorrer el verano de su infancia y duelo de la reina Juana la Loca, que se llama como su hija (Joana); ha aparecido por sorpresa una astróloga (la autora es Cáncer y en su signo entró Júpiter) y ha servido copas como reto.
Después, la Ile de Ré (“estamos justo donde tenemos que estar”), un supuesto amante (“En retrospectiva, el proceso resulta agridulce. Resulta halagador sentir el deseo ajeno, pero es tóxico vincular la propia autoestima a la mirada escrutadora de un hombre”. “Nuestro intercambia sella instantáneamente un mundo silencioso de deseos que no serán. Las sonrisas furtivas indican un reconocimiento tácito. Me alegran por dentro porque me devuelven por un instinto a la mujer que fui.”), una paella, las fiestas de Gràcia (“Your life is now”), un curso de cocina (“Beso mejor que guiso, pero esto va a cambiar”), un nuevo look, el “viaje del héroe” (Joseph Campbell) a Madrid, donde había vivido (“¿Está tu vida escrita o tienes todavía margen para escribirla?”, A los 50, ¿sigues o te paras?). “La esperanza es la hermana pequeña del dolor” (Jean d´Ormesson). La esperanza, de la mano del dolor, evita el extravío.
Viaja a Oslo (72 horas), sufre una cierta tristeza, se empeña en ser escritora (“Confío en que el tiempo nuevo me traerá claridad, que sabré qué camino seguir y que tendré energía para emprenderlo”), disfruta de la amistad (“Cuantas más mayores nos hacemos, más mágicas nos volvemos”), va a un desfile de Isabel Toledo (creadora del vestido lemongrass de Michelle Obama en la primera investidura de su marido), se hace “librera por un día”, se hace un arreglillo estético (“me siento bien porque me veo mejor”), forma parte de un jurado literario, celebra el 80º cumpleaños de su padre, “mata al dragón” (23 de abril, Sant Jordi), conecta con una astronauta rusa y con un travesti, le echan las cartas del tarot en su afán de ser escritora, se trabaja el suelo pélvico (“En la menopausia todo se estropea”), visita la Sagrada Familia (un proyecto de 12 años más), le regalan una orquídea, se reencuentra con sus compañer@s de la Universidad, lee (“si no lo leo, no lo creo”, “Me reconocí y me sentí menos sola en el mundo porque otra persona fue capaz de describir la sensación que experimento. Por eso leo y por eso escribo”), la mirada de un niño le inspira (esto no acaba hasta que acaba) y le pasa el testigo de los 50 a una amiga. “Mujer de 50 años busca mito”,  con valiosas lecciones aprendidas que nos vienen muy bien a tod@s. “Tú decides qué áreas quieres cerrar y/o abrir. Es tu vida”.
A lo largo de este año, de las 50 experiencias vitales, Neus destaca dos canciones: ‘Eternal flame’ de Bangles (www.youtube.com/watch?v=PSoOFn3wQV4, e ‘It’s a wonderful life’ de Black (www.youtube.com/watch?v=uMXz3TQOS_c). Una preciosa banda sonora.      
Un libro muy especial, altamente recomendable. “Confía y Disfruta” es el lema. Te felicito, Neus, por tu coraje, tu valentía en esta “start-up vital” de los 50; y a tu pareja, Steve (“Una de las cualidades que más agradezco a mi marido es su respeto por mis proyectos”). Y a la persona que me lo recomendó, que es puro amor.