IL3 & RNE: In-Fluir y Gestionar, con Atenas al fondo


Disfruté mucho de la sesión inicial de coaching estratégico ayer por la tarde en la sede de Right Management en Barcelona (Diagonal 567, en L’Illa). Un par de horas deliciosas conversando con una gran profesional directiva de amplia experiencia. Como resultado, un plan de acción ambicioso que seguro cumplirá en los próximos meses.
Esta mañana, segunda sesión sobre Liderar: Fluir, In-Fluir y Con-Fluir en el IL3 de la Universitat de Barcelona, integrada en el Talent Hub del Human Age Institute. Me siento muy orgulloso de esta colaboración para favorecer la empleabilidad de los alumni de esta prestigiosa Universidad. Y me gusta especialmente que la Directora del IL3 y su equipo asistan a estas sesiones. Mi gratitud a Neli, a Cristina y Amanda, Luis y todo el equipo de IL3, a Mónica, Carolina y tod@s l@s participantes, a María Jesús, Dani y tod@s l@s compañer@s del HUAI. Y en diciembre, la tercera para cerrar el Ciclo.
En esta ocasión hemos trabajado In-Fluir, el Liderazgo de Equipos. Cómo conseguir que los miembros del equipo “fluyan” en torno a un reto (Marcar la pauta, Visión compartida), elevando sus capacidades (infundir energía) y de forma colectiva (hacer equipo). Simple, pero no fácil. Hemos rendido merecido homenaje a Warren Bennis (el padre “científico” del Liderazgo), a Manfred Kets de Vries (las 3 H: Humildad, Humanidad y sentido del Humor, más la Honestidad), a Charles Darwin y Paul Ekman (las emociones), a Sonja Lyubomirsky (la felicidad y sus actividades deliberadas) y a David Rock (modelo SCARF). Hemos hablado del estilo de Liderazgo (concretado en siete actividades), de los jefes tóxicos (tipología, fuentes, qué hacer, gestores de toxinas), de la diferencia entre trabajo y empleo, del modelo empresarial de Felicidad de R (gracias, Santi Vázquez y compañía), de la pasión (Robert J. Vallerand, Psicología de la Pasión). Resulta evidente que el Liderazgo no se improvisa.
Almuerzo con Meritxell Obiols, excelente coach y buena amiga. La Dra. Obiols dirige el Programa de Coaching en el Entorno Laboral de IL3-UB y es autora de ‘Coaching para todos’. Gracias, Meritxell, por tu sabiduría y tu amistad.
Y antes de volver a Madrid, he tenido el honor y el placer de participar en el programa ‘Anem de tarda’ (vamos de tarde) de Radio Nacional, Rádio 4, dirigido y presentado por Goyo Prados. Puedes escucharlo en www.rtve.es/alacarta/audios/anem-de-tarda. Hemos hablado de lo que tiene de nuevo este Management (en un entorno VUCA: Volátil, Incierto, Complejo y Ambiguo, de desarrollo tecnológico, en el que el talento es más escaso y valioso que el capital), de la necesidad de diseñar una estrategia y un modelo de negocio, de la calidad directiva en nuestro país, de generar un tamaño de compañía, etc. Muchas gracias, Goyo, por la entrevista, que ha sido especialmente fluida.
En estos pocos días desde que ‘Nuevo Management para Dummies’ ha visto la luz, el libro ha merecido artículos en El Mundo, Expansión, El Economista, Invertia y Finanzas.com El próximo 24 lo presentamos “en sociedad” Ana María Castillo y un servidor en Málaga, como corresponde.  Y nos quedan un montón de medios (prensa, radio, televisión) en los que hablar los autores de fracaso empresarial y emprendedor, gestión y dirección, jefes tóxicos y tónicos (líderes de verdad), casos de empresas españolas de éxito y de fracaso, profesionalidad e improvisación…

La lectura de hoy ha sido ‘Grecia en el aire. Herencias y desafíos de la antigua democracia ateniense vistos desde la Atenas actual’, del ovetense Pedro Olalla (1966). Helenista, escritor, traductor, profesor, fotógrafo y cineasta, Pedro Olalla vive en Grecia desde 1994. Ha recibido, por sus numerosas contribuciones, el título de “Embajador del Helenismo”.
El autor nos acompaña por un viaje, desde la Colina de las Ninfas (donde nos recuerda las sabias palabras de Solón, s. VI a.C., y su seisachtheia, la valiente decisión de suprimir la esclavitud por deudas) por Melite hacia Pnyx (“la ciudad son los hombres, y no los barcos ni los barcos vacíos”, Nicias). Bajando de Pnyx, el concepto de ciudadanía, de democracia, de dignidad (la vida humana, más valiosa que cualquier tesoro). Por la roca del Areópago, bajando hacia Thiseio (Aristóteles analizó el régimen político de 158 polis) y ya en el Ágora (que significa “reunir). Junto al Pórtico Real (donde se guardaban las leyes de Solón), en el pórtico de Zeus Eleuterio (el “libertador”), ante el Altar de los Héroes Epónimos, junto a los restos del “Bouleteurion” (el Consejo de los 500, instituido por Clístenes), el “Metroon” y la “Tholos”. Los Tribunales de la Heliea, los árboles (el roble, de Zeus; el olivo, de Atenea; el laurel y el ciprés, de Apolo; el mirto, de Afrodita; el pino, de Pan; la higuera, de Hades). La democracia de Pericles (443-429 a.C.). Por el sur del Ágora, la imprescindible división de poderes (Pedro Olalla nos recuerda que Aidós –la vergüenza- y Diké –la justicia- son fundamento de la virtud política). La “areté” (el potencial, que hemos traducido mal por virtud) se alcanza a través de la “paideia” (la educación). Como nos diría José Antonio Marina, la educación está antes y no después del talento.
La “aristeia” es el esfuerzo individual por la excelencia que nos lleva a la contribución por el bien común. “¿Por qué razón debe ser admirado un poeta? Porque por su habilidad y persuasión hace mejores a los hombres en las ciudades” (Aristófanes, ‘Las ranas’). En el antiguo barrio de los marmolistas, Sócrates (“una vida sin reflexión no merece ser vivida”), hijo de una comadrona y un cantero. El cuestionamiento como forma de vida, la aceptación de una condena injusta.
Aplicación estricta y rigurosa de la ley & piedad (clemencia, tolerancia, compasión por el débil). En el cerámico, llegando a la Academia: Platón. “Fue un erudito griego, Jorge Gemisto, quien en la primavera de 1439 dio a conocer a un puñado de inquietos florentinos de la corte de Medici el verdadero pensamiento de Platón y convenció al poderoso Cosme de la necesidad de fundar en Florencia una Academia para el cultivo de saberes que tuvieran por objeto al ser humano en el mundo”. Humanismo. El ideal de un gobierno de los mejores, orientado al bien común, controlado por la sociedad en su conjunto.
Aristóteles, un meteco (extranjero libre, carente del derecho de ciudadanía en Atenas), fue el gran sistematizador. Tres regímenes de signo positivo (monarquía, aristocracia, politeia) y tres de signo negativo (tiranía, oligarquía y democracia). Para Aristóteles, como para Platón, la riqueza material no es el fin de la polis; lo es la dignidad humana.
Regresamos con Pedro Olalla por el barrio del cerámico (de los ceramistas), el jardín de Epicuro (que llegó allí tras el fallecimiento de Alejandro Magno, 323 a. C.). En el museo de la Acrópolis, el friso de Fidias en el Partenón. Nostalgia de la democracia defendida desde Solón a Demóstenes. Desde Octavio Augusto emperador (31 a.C.) la democracia cayó en el olvido durante 1.500 años. La República Romana nunca fue una auténtica democracia (“la democracia ateniense murió sin descendencia”). Tampoco los Things nórdicos, ni los Wieces polacos, ni los gremios del Báltico, ni los Estados Generales franceses, ni las Cortes hispanas, ni el Parlamento inglés ni las Repúblicas italianas. El liberalismo, inicialmente filosófico y político (dignidad individual, igualdad ciudadana, participación en lo común, universalismo), se fue desplazando a lo económico (no intervencionismo estatal, oferta y demanda, libre competencia). La democracia liberal se convirtió en burguesa.
Exquisito recorrido por Atenas (“la más noble ciudad”), el mismo espacio en otro tiempo, éste de crisis y de caos. Pedro nos llama a reivindicar la verdadera democracia. ¿Qué nos separa de este sueño? En el fondo, nuestra voluntad. Nuestra implicación. No puede construirse un mundo diferente sobre una sociedad indiferente”. El precio de no hacerlo, que la democracia sea “la sombra del humo” (expresión de Sófocles en ‘Antígona’, la inconsistencia y la desgracia de quien ha perdido la alegría).