El talento de Vicente del Bosque, en su biografía autorizada


Excelente la reunión estratégica que hemos celebrado la Dirección de ManpowerGroup en los Ojos del Guadiana. Mi agradecimiento a nuestra anfitriona, Sonsoles; a la organizadora, Zulima; y a tod@s mis compañer@s.
Ya en Madrid esta tarde, he estado leyendo “VICENTE. Biografía autorizada”, de cinco periodistas deportivos: Javier Amaro, José Félix Díaz, Miguel Ángel Díaz, Miguel Ángel Lara y Raúl Valera. Un compendio de 300 páginas sobre la vida del seleccionador de La Roja, con prólogo de Iker Casillas (que reconoce que Del Bosque es la persona que le hizo campeón de Europa y del Mundo y quien le bajó a los infiernos como futbolista y como persona).
De la vida y obra de Vicente, podemos quedarnos con que nació en Salamanca el 23 de diciembre de 1950, que de niño trabajaba su precisión en el disparo con una portería dibujada con tiza, que es fan del programa “Cifras y letras” y de la serie “El secreto de Puente Viejo”, que admira a Miguel Induráin, desde hace 35 años hace la misma quiniela, le encanta hacer magia con las cartas, le gusta viajar a Salamanca y a Marbella, hizo la mili en Alcalá de Henares, juga bien al pádel y al futbolín, suele veranear en Cabrerizos, utiliza palabras típicas salmantinas, usa bigote desde 1974 (por petición de su esposa, Trini), su cantante preferido es Serrat, es un maniático del orden, sus platos favoritos son la menestra y los huevos fritos, piensa que “todo lo que sucede conviene”, uno de sus libros favoritos es “El Conde Lucanor”, usa colirio antes de las entrevistas, no fuma (solo algún puro, de vez en cuando), recita la lista de convocados de memoria, su jugador ideal sería una combinación de Pirri, Velázquez y Grosso, es fan de los crucigramas, llama al embutido “el marisco salmantino”, aficionado al ciclismo y al tenis, opina que “el fútbol suele castigar a los que se creen muy buenos”, utiliza asiduamente la palabra “majo”, jugó de 1961 a 1984 (441 partidos como profesional, 11 temporadas en el Real Madrid),18 veces internacional (capitán en dos ocasiones), empezó a estudiar para entrenador a los 27 años, tiene todos sus apuntes como coach, ganó dos Ligas (2001 y 2003) y dos Champions (2000 y 2002) con el equipo blanco, le dijo a los jugadores antes de la final del Mundial 2010: “Son un ejemplo para los niños, no lo olviden”, Don Santiago Bernabéu dijo de él: “Gran jugador, pero mucho mejor persona”, mejor seleccionador del mundo en 2009, 2010, 2012 y 2013.
Guardo muy buenos recuerdos personales de Vicente del Bosque, especialmente en alguna presentación en el Hotel Miguel Ángel organizada por la agencia EFE y sobre todo en el “Hoy es Marketing” del año pasado, en el que tuve el honor de liderar la mesa redonda con él y con Rosa García, presidenta de Siemens (2.500 asistentes).
Sobre el libro, es un compendio muy completo. A un servidor le gustan más los libros con un modelo de liderazgo que, partiendo del deporte, nos sirve a cada un@ de nosotr@s para la empresa y para la vida. En este texto, solo en las páginas 55-63 el propio Vicente nos habla de las cualidades de un entrenador ideal (ser una persona ejemplar; con criterios firmes; recto, con principios y moralmente íntegro; obligado a estar preparado y a estar en continua formación), la doble tarea de la estrategia deportiva (decidir una idea de juego, impartir una organización, formar una plantilla, construir un equipo, elegir un método de entrenamiento, escuchar las opiniones de los ayudantes, ser sencillo en la puesta en práctica de todo) y el estilo de dirección (el entrenador debe aspirar a humanizar a su equipo, mantener una disciplina, cohesionar el grupo –ganarnos su confianza, conocer y compartir los objetivos del juego, conocer y compartir los objetivos, jugadores de equipo, talento con orden, obligación de emocionar, no discriminar a nadie, huir del inmovilismo, adaptarse a los tiempos, resolver conflictos, estilo de comunicación, delegar tareas, motivar-).
Y, por supuesto, Liderazgo. En su opinión, “el entrenador debe ser líder y ha de tener influencia sobre los demás para que todos se muevan en la misma dirección. Yo creo en un liderazgo afable, cordial, emocional y compartido. El fútbol es un juego y hay que verlo de forma positiva, optimista, alegre y exigente. No se puede estar cabreado todo el día. Entiendo que el líder es admirado y el jefe, temido. Para ser un buen líder resulta más importante la práctica que la teoría. Para liderar un grupo es clave tener equidad, tratar a todos de acuerdo con sus méritos, y tener sentido común”.
Mi agradecimiento a Vicente del Bosque, el único entrenador que ha ganado Champions, Eurocopa y Mundial de selecciones. Ya sabes, admirarle es aprender de él, de su estilo de liderazgo, y aplicárnoslo en nuestros hábitos.