Ayer, en el
VIII Foro Mujer y Liderazgo, me
precedió en el uso de la palabra Ofelia Marín-Lozano, profesora de Aliter y
directora de Economía del Círculo de Empresarios que preside Mónica Oriol. Su exposición sobre La salida de la crisis es una de las más
brillantes que he escuchado nunca sobre el tema.
Ofelia dividió
su presentación en cuatro bloques:
I. El mundo en perspectiva: países
desarrollados frente a emergentes. Los países emergentes representan un
tercio del PIB mundial y en 2030 serán la mitad (ese año, China e India serán
el 40% del PIB mundial y China pesará tanto como EEUU y la zona euro juntos):
¿crecen a nuestra costa o a nuestro favor? A nuestro favor, sin duda, en una
economía global.
¿Cuánto tiempo
hemos perdido? El mundo, dos años (en 2010 se recuperó el PIB de 2008); China y
Brasil, nada; EE UU y Alemania, 2’5 años; España, una década. Es un mundo con
muchos problemas, entre los que no está la inflación, pero sí (para nosotros)
la deuda pública y el déficit público.
II. España en
perspectiva: no estamos tan mal. Cinco puntos esenciales: somos el 3º país del
mundo con mayor crecimiento de la renta per cápita desde 1950 (por detrás de
Japón y Corea del Sur, por delante de EE UU y todo el resto de Europa); en
términos de patrimonio, el español promedio es “más rico” que el estadounidense
o el alemán (7º país del mundo, tras Australia, Japón, Italia, UK, Canadá y
Francia); desde 1999 hemos creado 1’7 M empleos (pero la población ha aumentado
en 7 M; hemos llegado a crear 5 M, de los que hemos destruido 3 M); desde 1999,
2ª potencia europea en exportación de bienes (solo por detrás de Holanda) y
desde 1995, 2º país por incremento de llegadas entre las grandes potencias
europeas (seguimos siendo el 2º país del mundo y el 1º europeo en ingresos por
turistas); buena balanza por cuenta corriente; 20 empresas líderes mundiales, 8
en el Fortune 500, 4 entre las Top 20 de la zona euro por valor bursátil; se
empieza a recuperar la competitividad perdida (por flexibilidad laboral,
moderación salarial y caída del precio de la vivienda).
III. El camino para salir de la crisis. El
crecimiento crea empleo, y no al revés. Cómo crecer sin proteccionismo:
internacionalización, con la empresa como protagonista. Mercado interior:
estamos dejando de producir en juguetes, textiles, electrodomésticos por la
competencia asiática, con buenos ejemplos españoles. Si ahora los costes chinos
son ¼, en 10 años serán la mitad (lo que no compensará por transporte, etc).
Mantener la industria. Mercado exterior: si no hubiera sido por la exportación,
el PIB español habría caído el doble. Foco en la internacionalización. Tenemos
que producir con calidad y a un coste competitivo (destacamos en manufacturas
de alto valor añadido, tecnología intensiva, servicios); si nos comparamos con
Alemania (2º exportador mundial y 1º europeo), los germanos tienen más
mentalidad internacional (55% habla inglés; 20% de los españoles lo habla), sus
empresas un mayor tamaño (59% con más de 50 empleados; España, el 38%),
invierte en I+D el doble (0’4 patentes por M € invertido en Alemania, un total
de 24.000; España, 0’1 patentes por M € invertido, 1.451), el doble de personas
con FP y la mitad de universitarios.
Austeridad,
imprescindible para reducir el coste fiscal, facilitar la financiación y
reducir el coste regulatorio. Más de 2/3 del gasto público son prestaciones
(pensiones) y sueldos de empleados públicos. Sanidad: 400 M de consultas
anuales en atención primaria y urgencias (casi 10 por hab/año) a 25 €/visita.
10.000 M + 14.000 M en medicamentos (300 €/hab). Educación primaria: 1 profesor
por cada 13 alumnos (en Alemania, 18; en Francia, 20). Universitaria: 8.000
€/alumno de coste, de los que el alumno paga 800-1.000 € (en EE UU o UK lo paga
todo). El doble de universitarios en proporción a la población; ninguna
universidad española entre las 100 mejores del mundo. Educación generalizada y
de mala calidad. Abuso de la justicia: 10 M de asuntos judiciales, 1’5 M de
sentencias, con 5.000 jueces. Las tasas (200 M €) apenas cubren el 5% del
coste. Sistema penitenciario: en 10 años, de 44.000 a 76.000 reclusos (los
extranjeros, de 8.000 a 27.000, el 36% del total); el coste, 30.000 €/recluso,
el triple que un hotel de 3 estrellas. Subsidios: 75.000 M €, más que la
sanidad. Empleados públicos: se han multiplicado por 4 desde 1978 (de 0’78 a 3
M). Impuesto de sociedades: 1’5 M sociedades en España, de las que 1 M no
declara nada. Solo 15.000 sociedades con un Bº superior a 100.000 €. IRPF: los
autónomos declaran ganar 11.000 €, frente a los 20.000 € de los asalariados.
Inmigrantes: 7 M, de los que 1 M ilegales; solo 1’5 M contribuyen a la Seguridad
Social, y por el importe mínimo.
Por tanto, el
déficit público se puede reducir a 0: reduciendo el fraude, ajustando los
subsidios, optimizando las tasas, reduciendo el nº de empleados públicos,
reformando las pensiones, controlando la inmigración y convirtiendo la
austeridad en filosofía de actuación (no puede ser que de 5 € ingresados, el
Estado gaste 6).
IV. Conclusiones. La competitividad, el
compromiso con el trabajo bien hecho, es cuestión de voluntad y de mentalidad.
Excelente
presentación, Ofelia. Enhorabuena. Muchas gracias por compartirla con nosotr@s.
Ayer, tanto
Ofelia Marín-Lozano como María del Pino (presidenta de la Fundación Rafael del
Pino) y Belén Romana (presidenta de la SAREB, galardonada con el premio Mujer
Líder 2013) recibieron sendos ejemplares de El
per-verso libro de las carencias del alma, de Yolanda Sáenz de Tejada (la
mejor poeta de España) y un servidor. Una lectura muy apropiada para el verano.