Lo pasé muy
bien ayer con los profesionales del Grupo Hermanos Martín (Supermercados MAS)
aprendiendo juntos sobre la Dirección práctica del Talento. Sobre todo, en lo
que atañe a la motivación: el palo y la zanahoria (la amenaza y la promesa de
premio) no funcionan; es la motivación intrínseca (el sentido, la libertad, el
aprendizaje) lo que nos mueve, lo que nos moviliza.
Me han llegado
los ecos de la presentación el viernes de El
per-verso libro de las carencias del alma, de Yolanda Saénz de Tejada y un
servidor, en Murcia, con motivo de la entrega de los Premios Anuales de la
asociación Canal Literatura. Junto a
Yolanda, la mejor poeta de España, Lorenzo Silva, Sebastián Mondéjar, Mari Cruz
Agüera, Ana María Tomás, Julia Muñoz Ripoll, José Belmonte y Pau Pérez López.
Regresé ayer de
Sevilla (una ciudad ya inmersa en la Semana Santa) a las 18,30 h y poco después
Zoe y un servidor nos fuimos a pasear (bajo la lluvia) por la Gran Vía. Tanto
en la Casa del Libro como en la FNAC
de Callao, El per-verso libro estaba
muy bien situado (en la primera quedaban algunos ejemplares de Del Capitalismo al Talentismo; en la
segunda, ya no). Y aproveché para comprar algunos DVDs (Argo, El recuento, De tu ventana a la mía) y libros (¡Sí, puedes!, Nuestra mente maravillosa,
Alfred Hitchcock and the making of Psycho).
Ya en casa,
mientras veíamos Regreso al futuro 2 (a
Zoe le encanta esa trilogía tan ochentera), me puse a leer ¡Sí, puedes! 40 píldoras estimulantes para mentes inquietas, de
Alejandro Suárez Sánchez-Ocaña.
Se trata del
tercer libro de Alejandro, tras sus best-sellers Ha llegado la hora de montar tu empresa y Desnudando a Google, que en su día comenté en este blog. Alejandro
Suárez Sánchez-Ocaña es ante todo emprendedor, business angel y asesor de compañías tecnológicas, y en este texto
nos ofrece “una mezcla de sentimientos y de ideas que me pasan por la cabeza, y
que quería compartir contigo”, como nos cuenta en la introducción. Gracias,
Alejandro, por esa reflexión y generosidad.
De las 40
píldoras, todas estimulantes, me quedo con:
- La suerte es
Dios que trabaja desde el anonimato (el autor diferencia entre “suerte” y
“fortuna”, y cita a Cervantes: “El que no sabe gozar de la ventura cuando le
viene, no debe quejarse si se pasa”.
- Tal vez la
pregunta más incómoda es: “¿Eres feliz?”. “Las personas fueron creadas para ser
amadas, y las cosas fueron creadas para ser usadas. La razón por la que el
mundo está en caos es porque las cosas están siendo amadas y las personas están
siendo usadas” (Jonathan Moldú).
- Cambia,
para cambiar el mundo. Se necesitan perspectiva y análisis, disciplina y
tenacidad.
- ¿Cómo te
comerías a un elefante? “No hay nada más peligroso que un tonto motivado”
(Emilio Duró).
- La indecisión
es la peor decisión.
- El mejor
libro de management es la Biblia (eso también lo cree mi buen amigo Joxé Mari
Ulazia; en especial, dice él, el Evangelio).
- El Ego es
como un perro. “El perro tiene que seguir al amo, y no el amo el perro. Hay que
hacer que el perro te siga. No hay que matarlo, sino domarlo” (Jodorowsky).
- Las
supermodelos no se casan con albañiles. ¿Por qué será? Las apariencias son
importantes.
- Las hormigas
siempre llegan a fin de mes: Persistencia, Previsión, Motivación, Hasta el
infinito y más allá (recolecta todo lo que sea posible).
- ¿Qué dirán de
ti en tu velatorio?
- Nunca
discutas con un imbécil (“El mejor truco para ser estúpido es intentar parecer
muy sofisticado e inteligente”, ASS-O).
- Nada te
posiciona más ni mejor que el lujo de permitirte decir “no”.
- El deporte
nacional no es el fútbol, sino la envidia.
- Ser realista
es elegir lo imposible cuando lo posible no es suficiente.
- Las ideas
están sobrevaloradas (Todos tenemos ideas. La diferencia es el pequeño
porcentaje de personas que se deciden a ponerlas en marcha).
- Los pies en
el suelo y la cabeza bien alta, junto a las nubes.
En la píldora
19, “Extirpar a los terroristas”, Alejandro tiene la amabilidad de recordar cuando
estuvimos juntos, en 2012, impartiendo un curso de intraemprendimiento para una
empresa tecnológica del Grupo Santander. Le hablé de los “terroristas
corporativos”, personas que se levantan cada mañana con el firme propósito de
desestabilizar y perjudicar a su propia empresa. Según datos de Silvia Damiano
(en su espléndido libro Implícame)
llegan a ser hasta un 17% de los empleados. Alejandro lo conecta con el
concepto de Gente Tóxica y con los jefes a lo Darth Vader y Mr. Bean. “El otro
día cerraron mi empresa por peligro de contaminación tóxica. –No jodas,
¿amianto? – Peor aún, personas”.
Un libro muy
práctico, enormemente útil, tremendamente actual, para comerte el mundo. Avalado,
en contraportada, por ganadores como Jorge Lorenzo, Santiago Segura, Carlos
Baute, Irene Villa y José Mota. Ahí es nada.