El general Collin Powell, Secretario de Estado con George W. Bush y General de cuatro estrellas, le regaló ayer a Obama en el programa Meet the press de la NBC uno de los apoyos públicos más sólidos, argumentados y valiosos de la campaña. Powell declaró que piensa votar a Barack Obama el próximo 4 de noviembre (dijo de él que “posee tanto el estilo como la sustancia. Tiene el nivel para ser un presidente exitoso, excepcional”), que si bien le une a McCain una amistad de más de 25 años le pareció vacilante y un poco inseguro durante la crisis financiera y que Sarah Palin, candidata a VP con John McCain, no está preparada para liderar su país (“que la eligiera me hizo cuestionar el juicio de McCain”). Lamentó que los republicanos “hayan virado demasiado a la derecha”, que “hemos de frenar la polarización” y que “Obama no es musulmán, es cristiano, pero ¿hay algo malo en ser musulam´na en este país? La respuesta es no.”
Reconozco que admiré mucho al Colin Powell que dirigía las tropas aliadas en la primera guerra del golfo (leí varios libros que destacaban su estilo de liderazgo), pero luego me defraudó -como a millones de personas- al “vender” en Naciones Unidas lo de las armas de destrucción masiva como justificación de la guerra de Irak. Pasó por Madrid, por Expomanagement, prácticamente si haberse preparado la conferencia: improvisó sobre los “jefes” que había tenido en la Casa Blanca y cómo le habían tratado. En cualquier caso, es una buena noticia que Powell se ponga del lado de Obama; a dos semanas de las elecciones estadounidenses, aunque el candidato favorito va destacado tanto en el conjunto del país como en los estados decisivos (y batiendo records en financiación, con más de 3 millones de donantes), se teme el “efecto Bradley” (votantes que no reconocen su racismo y declaran en las encuestas no votar por McCain). Sería una gran decepción para el conjunto del planeta.
Esta tarde, en Barcelona, la SPOT (Sección de Psicología de las Organizaciones y del Trabajo) del Colegio Oficial de Psicólogos de Catalunya había preparado un Cine Forum con la película Mr.Brooks. Una iniciativa de la Presidenta de la SPOT, Mª José Pozas, y su equipo, y un privilegio para mí conducir el debate posterior a la película. Mr Brooks es la historia de un directivo (Premio del Año de la Cámara de Comercio) aficionado a matar. Un psicópata minucioso y planificador que no deja rastro. La película invita a una reflexión sobre:
- lo que es ser gestor, ejecutivo, directivo y líder (sólo en este último papel, que es el más relevante, las emociones juegan un papel destacado, hasta del 90%)
- la conciencia, o mejor la mala conciencia (en la cinta, personaje interpretado por William Hurt)
- la obsesión por los resultados (el protagonista, Kevin Costner, y la policía, Demi Moore).
- el perfeccionismo y la chapuza (el papel interpretado por el fotógrafo, Sr. Smith)
- Hasta qué punto este “ansia de sangre” es genético (la relación con Emma, su hija).
El debate, en el que han participado unas 40 personas, me ha parecido interesantísimo. Un especio de libertad de unos 90 minutos en el que cada uno aportaba al diálogo sin otro interés que aprender conjuntamente. Esta cinta de Hollywood, que de alguna forma justifica la violencia del triunfador (que utiliza a todos como marionetas, se considera un “adicto” y cree que lo suyo es genético), ha dado muchísimo juego y me alegro mucho de haber participado en él.