La fuerza de lo simbólico

Levantado a las siete de la mañana. A las ocho, salida a visitar las instalaciones olímpicas de Beijing 2008. Primero, el pabellón de baloncesto y los campos de béisbol Wuksong. Hemos tenido la enorme oportunidad de entrar en las obras (algo que sería inaudito en Occidente, por motivos de seguridad laboral). La mezcla “típicamente china”: edad media y siglo XXI a la vez. Barracones horribles y productividad mínima junto con una infografía fantástica y un modernísimo centro comercial (ChagAn Mall, Centro comercial de la eterna paz). Con capacidad para 18.000 espectadores, el pabellón de baloncesto posee tres plantas bajo tierra y cuatro sobre tierra, en un área de 168.000 metros cuadrados. Adopta un sistema de reciclado de agua de lluvia y cristales de fácil limpieza, coherentes con unos juegos de alta tecnología y sostenibles. Los campos de béisbol ocupan 12.000 metros cuadrados.

Después hemos ido después a la Ciudad Prohibida, en la Plaza de Tiananmen. Una larga travesía (no es la primera vez que visito este maravilloso lugar, símbolo del poder en China). Los chinos utilizan los colores como símbolos: el dorado es el del emperador (el poder), el rojo es el de la felicidad, el azul es el del cielo, el verde es el de la tierra y el gris es el de los ciudadanos. Precisamente los cinco colores de los cinco elementos que simbolizan las mascotas olímpicas, los Friendlies (los amigables).

Hemos comido junto al estadio de los trabajadores, donde se celebrarán los partidos de fútbol de los juegos olímpicos. Creado en 1959 como “Estadio Nacional”, se está actualizando para la cita límpic. Un óvalo de 282 metros por 208 metros. Desde el 18 de abril de 2006, se está transformando para acomodar a 62.000 asistentes. Y después del estadio (donde ha jugado el equipo de Beijing Guan), el indoor Arena, con capacidad para 15.000 espectadores, donde se competirá en boxeo.
Miles de sensaciones sobre lo que supone organizar unos juegos.

Vuelta al hotel a las 17:15 y salida de nuevo a las 18:30 para recorrer la iluminación de las distintas instalaciones. Cenaremos junto al lago, tomaremos juntos y esperaremos a los resultados electorales aquí en China a las 3 de la madrugada.